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- Melange vacua
- s medusas que en las tardes quietas caen desde el cielo como paracaidistas dormidos las lúbricas arcilla... l odio. He visto la más ciega de las noches y los cielos surcados por tropeles espumosos. He visto tambi... stal de fuego de agua profunda de hiel vencida de cielo abierto. fui hormiga pez cóndor de vuelo eterno
- El vaso olvidado
- ín boquiabierto al crepúsculo inminente viendo al cielo presintiendo la futura impertinencia del relente ... erse y fundirse en lago circular A medida que el cielo anegraba los azules su ojo de cíclope silente y g... s horas los insectos y el insomnio y a un lado el cielo abrió su párpado cansino el luto terminaba y la ú
- Porcelana quebrada
- edos aguzados, rasgando el vientre henchido de un cielo turbio y agrisado. Y en la laceración que ha pro... n de su reclamo en los faldones rebosantes de los cielos y por el tajo abierto en el costado en vez de lu
- Barquita del aire
- mpleza sublimada. === === ¡Ay, barquita que a los cielos llevás tu grano viajero, llevate mi corazón como... que lo arrime a su boca, y que lo sople hacia el cielo donde el verso se desboca. Y en brillante algara
- Busca
- os llamarada amanecer acuoso pájaros curvando el cielo terso eco madurgado de silbidos tácitos puertas a... en los corazones verdes lechos acuosos curvan el cielo donde la soledad humea combatiendo soles ansiosos
- Chayita lunera
- . Y entre tumbos y retumbos se va alborotando el cielo y al son de su caja nacen carnavales de luceros. ... al carnaval del destino. Y una gran ronda en el cielo va iluminando la noche hasta perderse en el alba
- A Sabeli
- sueños echa raíces fructifica migra de detrito a cielo. {{tag>poemas de_savias_extrañas_y_humedales}} -
- Magnolia
- es duermo en un lecho de cactus afilados bajo un cielo estrellado de dagas relucientes soñando polvareda
- Monarcas del delirio
- gregarios ademanes rojos, llagar de felicidad el cielo. Llevame en tu galope etéreo al mágico arcoiris
- osnopseR
- ba nocturna que cose lentejuelas en los tules del cielo; me verás en el follaje agitado y umbrío de mis
- Soñando pingüinos
- submarina ¡oh, pájaro no-pájaro sin ramas y sin cielo, nada de eso te hace falta! Raudo proyectil de c
- Remolinos de insomnio
- acunan el silencio. XII Un murciélago salta al cielo raso ¿o fue un duermevelamiento, efímero polizón
- Sinfonía mínima
- as frescas y brillantes suena la flauta azul del cielo en el nicho florecido de la oreja de la tarde ha
- La revancha de Ícaro
- lás al fin pendiendo victorioso de las curvas del cielo como una medalla acróbata y demente como la ígne
- Su danza
- tados sus dedos-pétalos se abren y se cierran el cielo, zafiro embravecido, emite destellos que se cruza
