Letras inútiles, confusas, desorientadas, puercas, escandalosas... necesarias

OrquideAlucinadA

Leyendo la piel de la noche


De las estrellas traduciré su luz
para cantarte la canción de un tiempo
en que los hombres hablaban con los árboles
en el idioma sencillo de sus pueblos.

Te traeré una era de primeras lluvias
que escurrían entre piedras y totoras,
de pájaros con trinos primordiales
ensayando la luz de las primeras horas.

En los versos de un tiempo azul, lejano,
hallarás una paz que no es memoria,
es presente de palpable realidad
como este deseo de beber tu boca.

He de cantarte el salmo ateo de unos días
mecidos al compás de las mareas,
te arrullaré con voz de antiguas caracolas
hasta que entregues tu espuma a mis arenas.

Vení ahora que tallan los cometas
en la piel acuática y fragante de la noche
los tatuajes efímeros que nunca
sueñan o imaginan los poetas,
para filigranar un instante en nuestros cuerpos
el reflejo de su intensión de estrellas.

Vení ahora que el cielo me habla tanto
y es tanto lo que encierran sus historias,
necesito compartir estos momentos que hay en mí
para multiplicarlos y sembrarlos en tu boca.
Que florezcan en ella las orquídeas
cómplices de esta hora sin deshoras.

Cantar auroras,
recitar los astros,
respirar galaxias de rosada memoria,
brillar en tus ojos,
perderme en tu sombra,
cruzar el umbral de tiempo y espacio
disolviendo límites
y que nuestras almas, en astral lectura,
sean dos
y una sola.

DHB