Secciones
En la página oscura
de tus ojos muertos
con savia de estrellas
escribí mi nombre
sólo por si en tu viaje
te placía verlo
y me llevaras un rato,
no más que eso.
Pero ese humo tenue
en que te convertiste
empañó los cristales
de tu urna de cuentos
y partiste sola,
y me quedé muy lejos
extrañando tu muerte,
observando ese suelo
en donde tu silueta,
como último recuerdo,
un nido de hojas secas
le dejó a mi silencio.
— DHB
~~LINKBACK~~
Letras inútiles, confusas, desorientadas, puercas, escandalosas… necesarias para quien las profiriera